La tarta de queso que todos conocemos (y amamos) ha cambiado mucho desde sus orígenes hasta convertirse en el manjar que disfrutamos hoy día: nació en Grecia, la extendió el imperio romano y la popularizó Norteamérica.
Para rendirle culto a esta maravilla culinaria, decidimos traerles una versión cafetera, como nos gusta a nosotros, con una salsa toffee que te fascinará.
A perder el miedo, que con este paso a paso lograrás obtener un cheesecake espectacular.
Para la base de galletas
-Triturar las galletas hasta obtener migas finas. Puedes usar un procesador de alimentos para que sea más fácil. Poner las galletas trituradas en un bol junto con la manteca derretida y mezclar hasta obtener una consistencia a arena mojada.
-Coloca la mezcla en un molde desmontable de 20 cm de diámetro y distribuir uniformemente. Utilizar el fondo de un vaso para presionar contra la base. Llevar al refrigerador hasta terminar la crema del cheesecake.
Para el cheesecake de café
-En un bol colocar el queso crema a temperatura ambiente con 150 g de azúcar y el extracto de vainilla. Batir hasta que se integre todo. Reservar.
-En otro bol coloca 250 ml de crema de lecha fría y el café Viaggio Espresso que elijas. Recomendamos usar blends intensos como el RISTRETTO, INTENSO O VERONA. Batir la crema de café hasta que esté medio montada.
-Añadir la crema de café al batido de queso crema, añadir la gelatina hidratada y continuar batiendo hasta que la crema tome más consistencia.
-Volcar la mezcla del cheesecake sobre la base de galletas y llevar al refrigerador por 24hs o hasta que haya tomado cuerpo.
Para la salsa coffee
-En una cacerola coloca el azúcar restante (50 g) y deja que se caliente hasta que se funda y forme un caramelo tostado. Vigila y remueve para que no se queme, sino quedará amargo.
-Cuando el azúcar alcanza el punto caramelo, agrega con cuidado el resto de la crema (200 ml) y remueve la mezcla al fuego hasta que se integre todo bien y quede homogéneo.
-Deja enfriar un poco y vierte la mezcla sobre el cheesecake. Reserva en la heladera hasta que la crema de caramelo se haya enfriado por completo y todo tenga cuerpo.
¡Sirve y a disfrutar!